Aceite esencial de Sándalo

Con un aroma dulce, cálido, como un bálsamo de madera que lleva muchos años adherida a la tierra, recibimos este aceite en nuestro cuerpo. Este aroma es tenaz, se impregna por la piel y por las vías respiratorias abriéndose paso y dejando una huella inconfundible. Enraizándose.
Las cualidades del aceite esencial de sándalo son abundantes. Es armonizador, y tiene propiedades reguladoras y de conexión terrenal. Como tal, actúa de herramienta para proporcionarnos balance y calma corporal, mental y emocional.
El sándalo ha sido utilizado en centros religiosos, iglesias, en templos hindúes y ceremonias espirituales y religiosas de forma extendida alrededor del mundo para adorar a la Divinidad. Es recomendable disfrutar de él en la práctica de meditación, ya que una de sus virtudes es ayudarnos a profundizar en la misma.
Sedante natural, el aceite esencial de sándalo es excelente para aliviar la tensión nerviosa, el insomnio, el estrés y la agitación mental, la obsesión, la irritación, el miedo y los patrones de control. Además de aplacar por sus propiedades antidepresivas la negatividad mental y los estados emocionales bloqueados o alterados. El aroma de sándalo, que resulta intenso y suave a la vez, clarifica la negatividad y restaura la armonía en la mente. Acaso una escalera se forma con su esencia, por la que subimos hacia un mirador que nos permite ver con mayor claridad el panorama y tener una perspectiva balanceada.
Las propiedades afrodisíacas del sándalo ayudan a superar la inseguridad y la hipersensibilidad. Tracemos esta imagen: nos recorre su aroma y nos conecta a la tierra, pausando la pisada en el suelo, erguidos, con el corazón abierto en el pecho. Si te sientes abrumado o abrumada por tu situación vital, puedes probar con inhalar el dulce perfume del aceite esencial de sándalo. Es una acción reguladora y restauradora que enlentecerá tu respiración y ayudará a calmar tu mente y tus emociones.
Los mismos efectos restauradores son efectivos para las cuestiones del sistema inmune. Sus propiedades estimulante-inmunológicas incrementan la producción de glóbulos blancos. Estos glóbulos son parte del sistema inmunitario y ayudan a combatir infecciones y otras enfermedades. El sándalo promueve su producción y su circulación al resto del cuerpo.
Como cicatrizante, ayuda a la regeneración de la piel y su sanación. Posee propiedades antisépticas, por ende es utilizado para tratar el acné, la erupción cutánea, entre otras afecciones dermatológicas.
Sus propiedades cardiotónicas ayudan con el sistema circulatorio, y mejoran el suministro de linfa, nervio y sangre para todos los órganos y los sistemas del cuerpo. Además de balancear los síntomas del síndrome pre-menstrual, alivia el insomnio, la constipación, los nervios, ansiedad y preocupación, estimulando la habilidad de relajarse.
Por estas particularidades tan valoradas del aceite esencial de sándalo es que el mismo se ha vuelto difícil de conseguir, con períodos de escasez y carencia de oferta por parte de los productores de la India, que es la principal fuente dadora de este preciado tesoro.
El aceite esencial de sándalo se acopla, ancla y suaviza a casi cualquier otro aceite esencial, por lo que puede ser mezclado y conjugado con varios de ellos como la melissa, limón, bergamota, rosa, ylang ylang, entre otros.
Experimenta. Prueba con inhalar una gota de esencia de sándalo y sentir los cambios que cálidamente promueve en tu cuerpo, en tu mente y por supuesto, en tus emociones.
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