¿Cómo puede ser que hago todo lo que hago y aún así no me siento como quiero?
Me cuido en lo que como, hago ejercicio, me tomo tiempo para mí ¿porqué sigo sintiéndome ansiosa?
Tengo muchas ideas claras, pero no puedo llevarlas a cabo, y siento que el tiempo se me escurre entre los dedos... ¡ se me va la vida!
Estas frases son las que suelo escuchar de las personas que me buscan. Este tipo de auto-preguntas o reflexiones son parte de las que nacen cuando indagamos en nuestro vínculo con el estrés.
¿sabías cuál es una de las causas por la que el estrés queda acumulado en nuestras células y no logramos liberarlo a tiempo?
LO NO DICHO. Lo que no nos decimos a nosotras mismas. Lo que no expresamos, o no les decimos a los demás.
Pero claro que ésto no es para castigarnos o juzgarnos, porque muchas veces no nos enseñaron, o no nos dieron permiso, o simplemente no era una costumbre en nuestra crianza.
El 90% que uso la técnica de Decodificación de la memoria celular con una/o paciente, o mediante una conversación emerge la cuestión de la comunicación, sale a la luz eso que no dijimos, que no expresamos para con otros o para con nosotras/os misma/os
La gran mayoría de las veces la sensación de no hacer lo suficiente nos lleva a sentirnos no suficientes, que no alcanza, o que no alcanzamos, y esto es lo que hoy en día nos genera más sobrecarga de estrés y todo lo que viene aparejado (ansiedad, insomnio, sobrepeso, colesterol, migrañas, Etc...)
El estrés en su fase alerta, pasa a ser un estrés más sostenido, y nuestro cuerpo permanece en tensión porque estamos dandole inconscientemente una señal equivocada, estamos permaneciendo en un círculo permanente de estrés, sin salir, sin dar descanso, sin dar tiempo a la reparación orgánica y natural.
No somos lineales. Somos parte de la naturaleza, y funcionamos en ciclos. Necesitamos aprender a amar a lo incómodo, integrarlo e incorporarlo como parte del camino de la madurez. Esto en una pequeña porción es también gestionar tu estrés. Es un camino de auto-consciencia, de disposición, de apertura al cambio y a aceptar la transformación
Es posible que tengamos que considerar hacer ajustes, editar decisiones y refrescar preferencias, pensamientos, y por lo tanto, acciones.
¿Cómo es tu vínculo con el estrés hoy? ¿Estás permitiéndote expresarte contigo misma? ¿Estás siendo clara con tus necesidades también hacia el afuera?
Te leo atentamente, respóndeme ahora y compartamos puntos de vista. Feliz semana,
Nadia |
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