Bienestar femenino: una guía natural

Rosas, siempre en mi cocina.

Desde la comida que comemos hasta los pensamientos que pensamos y la forma en que nos movemos (o no nos movemos), nuestros cuerpos pueden obstruirse, por una gran cantidad de experiencias en la vida cotidiana. Y en algún punto del camino, a medida que estas experiencias se acumulan, el cuerpo se vuelve menos capaz de balancearse.

Aquí es cuando surgen los síntomas, advirtiendo que algo no está funcionando de la mejor manera. ¿La clave? Prestar atención a las señales que vamos recibiendo a lo largo del día; y aprender a cuidarnos para una y otra vez, volver al estado de homoestasis - balance natural del organismo.

En el mundo de la salud de la mujer, estos síntomas se han vuelto comunes. Los cambios de humor, el acné, el síndrome premenstrual, los calambres, el dolor de espalda, la sensibilidad en los senos, los sofocos con la menopausia, la lista sigue y sigue, han sido adoptados en gran medida por la sociedad como simplemente parte de ser mujer.

Todas estas posibles molestias son señales de su cuerpo de que algo no está alineado dentro de la interacción sinérgica de tu sistema. Cuanto antes puedas abordar la causa raíz, más rápido tu cuerpo podrá recuperarse de las capacidades curativas innatas para las que está diseñado.

Tenemos que empezar a pensar en la salud hormonal como base para la salud sistémica. El sistema endocrino tiene un papel importante en nuestra salud integral e inmunológica, junto con los sistemas nervioso, linfático, circulatorio y digestivo. Es de suma importancia y debe ser parte de la conciencia de la salud femenina desde la adolescencia. El equilibrio hormonal es de vital importancia para la salud sistémica de la mujer, además de la experiencia de más libertad y propósito en nuestra vida. Es la conexión con la intuición.

Nuestras hormonas pueden alertarnos sobre un posible desequilibrio sistémico, que luego se puede abordar antes de que pase demasiado tiempo. Los sistemas tiroideo, suprarrenal, digestivo y metabólico están íntimamente ligados al ciclo hormonal de la mujer.

Algunos consejos básicos para traer más armonía

Conoce tu ciclo menstrual.

Descansa, come los alimentos que te hagan bien. Y tené en cuenta los estados anímicos y emocionales en cada fase del ciclo. Hay momentos en los que vas a necesitar ir mucho mas despacio, tomarte mas pausas.. y hay otros momentos del mes en los que vas a tener mucha mas energa vital disponible, ganas de interactuar, crear y expandir. Conocer tu ciclo es fundamental. Te recomiendo los recursos de Miranda Gray

Bio-individualidad

Recordar que no todo es para todas ayuda mucho. Tenemos una bio-indiivdualidad que es necesaria respetar. Saber que alimentos son los que te hacen bien, complementar con hierbas, u otros suplementos naturales, movimiento adecuado y rutinas de descanso y relajación son fundamentales para nuestra salud. Por eso es necesario que tengas tus chequeos médicos actualizados y que comprendas como son tus ritmos, y necesidades para darle a tu organismo lo que necesite. En mis sesiones individuales on line o presencial profundizamos en todo ésto

Creatividad

nuestra anatomía reproductiva está asociada con la expresión creativa, por eso dar espacio a ésto es fundamental. A veces pasamos por alto la necesidad de crear o el gusto por volver a eso que nos encanta y nos hace bien al cuerpo y al alma. Considera darte espacio para explorar y nutrir tu creatividad siempre.

Plantas medicinales

El uso de plantas medicinales para acompañar y complementar tratamientos y rutinas es esencial en la salud esencial de la mujer. Son muchas y varían según las necesidades de cada mujer.

Hay algunas que son especiales para tener en cuenta. Y saber que cada planta tiene propiedades a nivel fisico, emocional y energético. Se pueden integrar de varias maneras, según el compuesto: infusiones, aceites esenciales, sahumos, unguentos, baños de vapor.

Algunas de mis plantas medicinales favoritas asociadas a la salud de la mujer

Melissa (Melissa officinalis) - deliciosa, con su sabor alimonado. Para tomar en infusiones, en aceite esencial o un óleo corporal preparado en maceración de aceite de jojoba. La melissa es calmante, ayuda a propiciar el buen descanso y a traer calma y serenidad.

Rosa - mi preferida, por sus cualidades tan amorosas y reconfortantes. El aceite esencial de rosa, es el que tiene mas propiedades reguladoras y se adapta a lo que necesitemos en el momento. Es delicioso para acompañar todos los momentos de cada uno de nuestros ciclos, trayéndonos conexión con nosotras mismas, amorosidad, ternura y fortaleza. A nivel de la piel, la rosa es calmante y regeneradora. Los pétalos de rosa pueden secarse y prepararse para tomar en infusion o incorporar en preparados de comidas. (imprescindible que las flores no hayan sido expuestas a ningún tóxico). También podés conseguir los pétalos secos en herboristerías o tiendas naturales.

Una infusión de rosas la preparas con agua casi hirviendo, dejas estacionando durante 15 minutos y tomas sola o endulzada con unas gotas de miel. Principalmente en los meses de invierno y otoño esta infusión a la noche resulta muy reconfortante.

Caléndula - una hierba que uso, preparo y recomiendo a todas las mujeres que quieren profundizar en el vínculo con ellas mismas, y en re establecer la salud hormonal.

La naturaleza misma y la nuestra propia es el camino a retomar este balance y salud holística con nuestro Ser Mujer.

Desde el 2015 acompaño a mujeres a re-encontrarse con ellas mismas, a volver a la salud, y al balance de una vida creativa, alineada a la naturaleza individual y a los ecosistemas que nos rodean.

Si estas buscando un espacio de armonía y calma, aquí te espero.

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Con cariño,

Nadia